Uno de los rincones que me relajan en Barcelona es el Claustro de la Parroquia de la Purísima Concepción, que se conoce popularmente por la Iglesia de la Concepción. Está ubicada en la calle Roger de Lluria con Aragón y es una burbuja de paz en este barrio tan transitado del Eixample. Casi no oyes el tráfico! Suelo entrar, sentarme, cerrar los ojos y plassss me transporto a un pasado gótico barcelonés.
El claustro pertenecía al Monasterio de Junqueras, fundado en el siglo XIV, que está ahora en la calle Junqueras. Los revolucionarios lo quisieron destruir, pero el ayuntamiento decidió en vez de eso, trasladarlo a la calle Roger de Lluria. Cada piedra fue desplazada, y el claustro se volvió a construir de manera idéntica en 1869 en el sitio que hoy lo tenemos. Increíble!!!!
Al claustro se le entra por la calle Roger de Llúria, dicen los historiadores del arte, que había sido uno de los más grandes de la Barcelona del medievo, junto al de la Catedral y al del Monasterio de Pedralbes. Tiene dos galerías superpuestas y unas columnas tan estilizadas que tienen muchos elementos comunes con las que hay en el Palau de la Generalitat.
Definitivamente es el que más me gusta de todos los claustros de Barcelona. Me parece de un tamaño ideal, una vegetación muy cuidada, la fuente hace el ruido justo para relajarte e increíblemente y como por arte de magia, logras aislarle de la calle Aragón y su mundanal ruido.
Cierra los ojos y relájate, seguro que conectas con tu yo interno…
Dirección: Claustro de la Iglesia de la Concepción. Calle Roger de Lluria con Aragón.
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